Una vez más.
¿Cómo se atreven a decir que atacamos a la democracia, que la repudiamos? ¿Cómo se atreven a llamar a esto democracia? ¿Cómo se atreve ayer Zapatero a hablar durante el debate del estado de la nación de dignificación de la política? ¡No son dignos de nosotros!
¿Y por qué me muestro tan indignado? Bueno, el abogado que impulsó en Málaga la ILP para cambiar los requisitos de las ILPs en Andalucía lo explica bastante bien:
En resumen, el Presidente de la Junta de Andalucía, Griñán, ha llevado a cabo una artimaña más propia de una mente criminal que de un político (aunque ahora mismo no sé en qué se diferencia lo uno de lo otro), para bloquear nuestra ILP y demostrar así de paso que el sistema democrático en este país está elaborado de tal forma que precisamente no se pueda hacer democracia, es decir, de tal forma que impida la verdadera participación del pueblo.
Un mecanismo tan sofisticado y maquiavélico como éste, requiere para conseguir el logro de su eliminación, que no salgamos de él, que nos separemos del sistema, que nos saltemos las normas...
Rebeldía, insumisión, desobediencia... Si ellos no quieren hacer democracia, ¡impongámosla!
Se puede decir más alto, pero no más claro. Es una dictadura y no se ve. Pero, ¿hasta cuándo...?
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