"Si luchas, puedes perder. Si no luchas, estás perdido".


lunes, 9 de diciembre de 2013

El brazo armado

Hace pocos días, el 5 de Diciembre de 2013, nos dejaba Nelson Mandela, una de las figuras contemporáneas más queridas, un símbolo de lucha y paz.

Lucha y paz. Que conceptos tan contradictorios, ¿verdad? 

Y sin embargo pueden ir unidos. Madiba (así se conoce a Mandela en su país, Sudáfrica), es el más claro ejemplo: recibió el Nobel de la paz por su labor frente al apartheid pese a que fue el líder del MK, el brazo armado del Congreso Nacional Africano (su partido), y estuvo veintisiete años en la cárcel. El brazo armado...

Violencia y paz... ¿pueden ir unidas?

Vamos a poner todas las cartas sobre la mesa para no ser demagógicos. Bien es verdad que Mandela fue condenado por sabotaje y otros cargos (nunca de sangre) por su labor al frente del MK (aunque éste después, con Mandela ya en la cárcel, sí que llevó a cabo atentados con civiles muertos). Bien es verdad que la situación que motivó en Sudáfrica el cambio a la no violencia por parte del CNA era cruda, muy cruda...

Pero, ¿no lo es en España? O en el resto del mundo. ¿No nos deprimimos o estresamos porque no tenemos trabajo o tememos perderlo o no sabemos cómo pagar las facturas o conseguir dar de comer a nuestros hijos? ¿No ha llevado esta situación, en sus niveles más extremos, a que muchas personas se hayan quitado ya la vida? ¿No es esa una forma de matar? ¿No mueren acaso todos los días niños en África por la hambruna? Y mientras aguantamos todo eso, ¿no hay personas en España y el mundo que viven con mucho más de lo que necesitan? ¿Y acaso algunas de esas personas no utilizan su poder económico y sus influencias para crear políticas que les benefician a ellos en detrimento de los más desfavorecidos? ¿Nos estamos sufriendo nosotros también nuestro propio apartheid? ¿Es raro pensar en defendernos del ataque por sistema, del saqueo constante, y del ensanchamiento progresivo entre las capas bajas y la pequeña élite dominante?

Es raro creer que haya gente que ate una soga a su cuello y que todavía no haya salido nadie con un arma en la mano y dirigiéndola contra un político, un banquero, un gran empresario, un especulador, un broker, o un lobbista. 

Quizá lo único que nos falte para dar ese paso, sea un líder...

viernes, 6 de diciembre de 2013

Yo celebro

Hoy se celebra el día en el que unos tipos hicieron creer a las personas que le estaban dando el poder a la ciudadanía cuando en realidad se estaban blindado para asegurarse que nadie les quitaba el poder.

Hoy se celebra el día en el que nos dijeron que los valores superiores de nuestra sociedad eran la igualdad, la libertad, la justicia y el pluralismo político, justamente para que cuando protestaramos porque no teníamos ni igualdad, ni libertad, ni justicia, ni pluralismo político, pudieran rebatirnos: "No, mira, si lo pone aquí, en este papelito..."

Hoy se celebra el día del derecho al trabajo. Ya...

Hoy se celebra el día del derecho a la vivienda. Claro...

Y el derecho a la sanidad, a la educación... Por supuesto.

Hoy, yo, David Salinas España, nacido en 1980, manifiesto que no celebro el día de la Constitución, ya que no he vivido un sólo día de mi vida en una democracia real, y que el texto de la Constitución actual es una farsa, es ilegítimo, es la coartada que usan nuestros gobernantes para controlarnos y reprimirnos bajo el auspicio del verdadero sistema: la dictadura encubierta.

Yo, hoy, celebro que vivo en un sistema corrupto que funciona como una maquinaria que roba a los pobres para dárselo a los ricos.

Feliz día de la corrupción a todos.





Ojalá algún día, ojalá pronto, podamos celebrar el derrocamiento de este sistema desigual, autoritario, injusto y bipartidista.

Eso sí merecerá una auténtica celebración.